Aunque ya esté bajando de intensidad en las noticias, en Haití la tragedia sigue, los problemas están ahí y crecen. Hace falta tiempo, trabajo y paciencia para que la cosa vaya mejorando poco a poco.
Por suerte hay gente destinada a ir y hacer este tipo de cosas que la mayoría no nos atrevemos o no estamos preparados para hacer. La semana pasada me crucé con una de estas personas. Un conocido de mi madre trabajaba allí como ayuda internacional cuando pasó todo. Ha vuelto unos días a casa para ver a su familia, pero hoy se vuelve a ir para allá. Siente que es donde debe estar y ayudar.
Con un contacto tan directo a mi alcance no pude sino dar mi granito de arena. He ha donado el 3% de los ingresos del 2009.
Pedí a esta persona que empleara ese dinero en lo que creyese conveniente, estando allí sabrá lo que es más útil o urgente. Él, que lleva años cooperando en ese país, cree que las personas que más están haciendo, trabajando, sin descanso y desinteresadamente, son unas hermanas misioneras que ayudan sobre todo a los niños. Así que para ellas va el dinero.
Si te diste el caprichito de comprarte o regalar una de mis piezas, debes saber que el 'heartmade' (hechas con el corazón) de mi lema también es un poco esta pequeña conciencia que ahora se va para Haití.
Muchas gracias a todos los que habéis confiado en mí, por haber hecho esto posible.
-
Although it is losing intensity in the news, in Haiti the tragedy continues, the problems are there and grow. It takes time, effort and patience that things will improve gradually.
Luckily there are people destined to go and do this kind of thing that most do not dare or are not prepared to do. Last week I met one such person. A man who knows my mother worked there as international aid when it happened. He returned home a few days to see his family, but now he's going there again. He feels he must be there and help.
With such direct contact within my reach I had no option but help. I have donated 3% of income in 2009.
I asked this person to use that money as he thinks appropriate, because of his years working there he knows what is more relevant or urgent. He believes that people who are doing the best, working tirelessly and selflessly, is a missionary sisters who help especially the children. So the money goes to them.
If you bought me o gave any of my pieces, know that the 'heartmade' of my motto is a bit of this little conscience is now going to Haiti.
Thank you very much to all who have confided in me, for making this possible.